Fue la frase
más repetida en aquel famoso discurso de Martin Luther King en pro de los
Derechos Civiles de los negros, en la America de 1963: ¡Hoy tengo un sueño!
Soñar
(despierto) es una capacidad exclusiva de los seres humanos. Porque soñar es
anhelar una vida mejor, es interiorizar deseos de cambio de un entorno
contrario a nuestro ideal.
Sueña la
mujer con su príncipe azul. Sueña el hombre con su ideal de mujer.
Un pueblo que sueña es un pueblo inconformista con lo que
acontece en la vida pública. Un pueblo que sueña anhela deseos de mejorar y, en Pozoblanco, por nuestra salud como pueblo, solo nos queda ilusionarnos con
los sueños del futuro antes que entristecernos con la historia del pasado.
La candidatura que encabeza SANTIAGO CABELLO decimos:
¡Hoy tengo un sueño!
Sueño con un Pozoblanco renovado, cuya clase política solo
tenga como único objetivo el servicio público.
Sueño con una nueva corporación articulada en torno al bien
común de sus vecinos. No deseamos políticos que busquen en esta actividad una
solución a sus vidas. Porque ha de venirse a ella con una experiencia previa
que aportar. No más mercenarios de la política que traen la guerra en su
actividad.
¡Hoy tengo un sueño!
Sueño con un Ayuntamiento en orden, porque de su orden se
deriva la eficacia y utilidad. Aquel en que sus trabajadores se encuentren
cómodos con la regulación y actualización de su categoría profesional. Una
regulación que recoja las reivindicaciones de cierto colectivo, en continuo
conflicto, si fuesen de justicia.
Sueño con denunciar y desterrar para siempre, la promoción
laboral con métodos que no sean la libre oposición y el concurso de méritos y
capacidad.
Sueño con una administración ágil, donde la concesión de licencias
y demás trámites administrativos, se resuelvan con la brevedad que los nuevos
tiempos requieren y la agilidad que las nuevas tecnologías posibilitan. ¡Que
la burocracia no nos esclavice!
¡Hoy tengo un sueño!
Sueño con unos Plenos Municipales reflejo de una sociedad
bien avenida, donde se asemejen más a una mesa de trabajo colegiada que a una
guerra de trincheras improductiva.
Sueño con una sociedad honestamente informada desde el
Ayuntamiento. Sin intoxicaciones partidistas que envenenan la vida pública.
¡Hoy tengo un sueño!
Sueño con un Pozoblanco limpio por la via de optimizar su
servicio de limpieza. Por la concienciación ciudadana, con campañas al efecto,
y por la dotación de medios contenedores en aquellos puntos de saturación de
residuos.
Sueño con un Pozoblanco donde sus vías más transitadas tengan
el nivel suficiente que las haga cómodas y rápidas (Mejora urgente de la capa
de rodadura de la redonda). Donde los caminos rurales que acceden al casco
urbano estén asfaltados en sus últimos tramos, evitando con ello la polvareda
que invade el medio ambiente urbano. Nuestros pueblos vecinos tienen resuelto
este problema. Pozoblanco lo padece.
Sueño con la urbanización más elemental de los polígonos
industriales que “de facto” funcionan en Pozoblanco. Son el mayor exponente de
la generación de empleo.
Sueño en definitiva, con un pueblo limpio y bello. No menos
que sus vecinos más cercanos que nos dan ejemplo de ello.
¡Hoy tengo un sueño!
Sueño con un Pozoblanco donde no se utilice a la población
como conejillos de indias para experimentos ocurrentes (Peatonalización de la
calle Mayor). Donde cualquier obra de envergadura que se proyecte, cuente con
el consenso de la fuerzas políticas y el aval de los ciudadanos. La
participación ciudadana en su gobierno la hace protagonista de su futuro.
¡Hoy tengo un sueño!
Sueño con un Pozoblanco, espejo de los pueblos de la comarca.
Porque Pozoblanco tiene la obligación y el deber de ser un referente, en todos
los sentidos, en el Valle de los Pedroches.
Porque… Pozoblanco merece soñar y que sus sueños se hagan
realidad.